Crítica: «Norma» en el Teatro de la Maestranza de Sevilla

Crítica: «Norma» Teatro Maestranza Sevilla Por Gonzalo Roldán

El Teatro de la Maestranza de Sevilla vuelve a traer a su escenario Norma, una de las óperas más conocidas de Vincenzo Bellini y cumbre del bel canto. Para la reposición de esta producción, apadrinada por el Teatro Regio di Parma y con puesta en escena de Nicola Berloffa, se contó con la dirección musical de Yves Abel. Berloffa trae la trama de celos y engaños amorosos original al siglo XIX, durante las primeras guerras de independencia entre Lombardía y Austria, dentro del contexto político del Risorgimento. La adaptación resultó muy creíble, tanto por aprovechar la inestabilidad política del momento para explicar los supuestos recelos ante la guerra de la protagonista – que encuentran en la dependencia económica y cultural de Austria una explicación plausible – como por el conservadurismo moral de la sociedad europea, deudora de la sociedad victoriana, tan bien representada con el vestuario y la caracterización de los personajes.

Una escena de "Norma" en Sevilla / Foto: Teatro de la Maestranza
Una escena de «Norma» en Sevilla / Foto: Teatro de la Maestranza

En escena, en lugar de asistir a una reunión de druidas en los bosques de la Galia, una arquitectura de cánones clásicos semiderruida hacía las veces del cuartel general de las tropas lombardas, que rinden honor a la suma sacerdotisa Norma y su séquito como consejeras en el conflicto armado. El bando austriaco oponente, liderado por Pollione, se prepara para un relevo en el mando y una ofensiva a gran escala, circunstancias que Norma desconoce, al igual que la infidelidad de su amado. Para las escenas más íntimas, tres paredes diseñaban la modesta alcoba de los hijos de Norma, abierta hacia el público sobre un plano inclinado que dota de profundidad la estancia. Estos dos espacios de aparente simpleza se completaron audazmente con un inteligente juego de luces ideado por Marco Giusti, y con el vestuario de época de Valeria Donata Bettella, de gran variedad y efectividad en la elección de tejidos y colores, y un diseño de peluquería muy oportuno. Todos estos elementos convirtieron la presencia escénica de los personajes en icónica, haciendo innecesarios otros alardes en cuanto al atrezzo se refiere. Así mismo, los números de conjunto, con el Coro de la Maestranza caracterizado para la ocasión, recordaban las grandes escenas de carácter épico de pintores como David o Delacroix. 

Una escena de "Norma" en Sevilla / Foto: Teatro de la Maestranza
Una escena de «Norma» en Sevilla / Foto: Teatro de la Maestranza

Pese a que la producción resultó atractiva en lo visual, el verdadero peso de esta recayó en el magnífico elenco vocal escogido. Sin duda, Yolanda Auyanet fue la gran protagonista de la velada; no en vano, su personaje ocupa el centro de la escena prácticamente en todo el desarrollo argumental. Si la pasada temporada ya nos embelesó con una espléndida Tosca, la Norma interpretada ahora fue espectacular por muchos aspectos. Huelga decir de una voz tan experimentada que acometió con habilidad las dificultades de la partitura; su maestría fue más allá, creciéndose en escena con cada nueva intervención hasta estremecer al auditorio por lo vívido de su interpretación en el final de ambos actos. Si bien en el aria Casta diva resultó algo tensa, el torrente vocal y la riqueza armónica de Yolanda Auyanet se desarrollaron en todo su esplendor, pudiendo afirmar, a día de hoy ,que ha sido la mejor Norma que la Maestranza ha escuchado en lo que llevamos de siglo. 

Junto a la soprano pudimos disfrutar de un no menos bravo Francesco Demuro como el infausto Pollione, el cual se redime de sus pecados con su sacrificio junto a su amada, si bien en la versión de Berloffa no se inmola junto a Norma, sino que es degollado por Oroveso. La voz de Francesco Demuro resultó muy oportuna para el papel, timbrada y brillante en los agudos y ágil en los pasajes dialogados; el cantante ofreció una digna réplica a su compañera de escena. La gran sorpresa de la noche la protagonizó Raffaella Lupinacci en el papel de Adalgisa, la joven seducida por Pollione que regresa a los brazos de Norma buscando su perdón. Desde la primera intervención, la mezzo brilló con luz propia, cautivando al auditorio con un timbre de voz de gran belleza y potencia. Su agilidad en las coloraturas, su capacidad para empastar con Yolanda Auyanet en los complejos dúos escritos por Bellini y su grácil estilo interpretativo embelesaron por sí solos, dotando a su rol de una prestancia escénica y una fortaleza argumental pocas veces vistas. Si la actuación de Norma no hubiera sido tan espectacular, Raffaella Lupinacci se habría convertido en la verdadera protagonista de la producción. 

Una escena de "Norma" en Sevilla / Foto: Teatro de la Maestranza
Una escena de «Norma» en Sevilla / Foto: Teatro de la Maestranza

Completaron el reparto tres voces de menor importancia argumental, pero de encomiable valía artística. El barítono Rubén Amoretti defendió dignamente el rol de Oroveso, con un timbre oscuro y rotundo, aunque por momentos falto de potencia. Por su parte, Mireia Pintó como Clotilde y Néstor Galván como Flavio tuvieron breves pero muy oportunas y timbradas intervenciones. Y, como no, descarar el encomiable trabajo del Coro del Teatro de la Maestranza, que bajo la dirección de Íñigo Sampil superó las cotas de excelencia vocal y destreza escénica a las que ya nos tiene acostumbrados.

La producción no podría haber sido un éxito sin el necesario marco instrumental que la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla, conducida por la batuta de Yves Abel, dieron a la producción; fue dúctil y se adaptó a las exigencias argumentales de la producción. Cabe, igualmente, citar a la Banda Interna del Conservatorio de Música Manuel Castillo, que interpretó los toques de fondo y dotó de profundidad la acción. La bondad musical de los cantantes, la precisión de los músicos y la audacia escénica contribuyeron a que la Norma de la Maestranza fuera, en su conjunto, todo un éxito y levantara en una prolongada ovación al público presente. Crítica: «Norma» Teatro Maestranza Sevilla


18 de noviembre de 2023, Sevilla (Teatro de la Maestranza).   Norma, tragedia lírica en dos actos de Vincenzo Bellini (1831) con libreto de Felice Romani.

Real Orquesta Sinfónica de Sevilla   Dirección Musical: Yves Abel.                                      Coro del Teatro de la Maestranza (Íñigo Sampil, dirección)

Dirección Escénica: Nicola Berloffa.  Diseño de escenografía: Andrea Belli. Diseño de vestuario: Valeria Donata Bettella. Iluminación: Marco Giusti (reposición de Juan Manuel Guerra).

Reparto: Yolanda Auyanet, Francesco Demuro, Raffaella Lupinacci, Rubén Amoretti, Mireia Pintó, Néstor Galván.

Lugar y fecha: Teatro de la Maestranza (Sevilla), 18 de noviembre de 2023.

OW